Metalepsis
Figura de
palabra que, en una relación causal, cambia de lugar a la causa (el antecedente) y
el efecto (el consecuente), o bien, da a entender algo a través de una cosa que
le precede, lo acompaña o le sigue. Es
decir se transpone un sentido que se da por sobreentendido. Por ejemplo: “el
niño trajo la sábana blanca para cubrir el cuerpo”. Se sobreentiende que murió,
por ende a la muerte de alguien se sigue tapar el cadáver con una sábana
blanca. Otro ejemplo, que da Beristain: “Le disparó heridas”. Aquí hay una
expresión inapropiada de la relación causa - efecto. Y es que otra visión de la
metalepsis es la de utilizar enunciados sinónimos, pero semánticamente inadecuados
en el contexto para producir extrañeza, comicidad, dar un rodeo a una idea o
establecer un cambio de personaje abrupto en una narración de tal forma que se
fusiona lo que dijo uno con lo que dijo
el otro.
Con la metalepsis se puede cambiar el sentido de una palabra o bien de
toda una oración.
También se le
llama metalepsia o transumptio.
Bibliografía.
Angelo Marchese y Joaquín Forradellas, Diccionario de Retórica, Crítica y Terminología Literaria, edit.
Ariel, Barcelona, 2013.
Antonio Azaustre y Juan Casas, Manual de retórica española, edit. Ariel, Barcelona, 2011.
Federico Carlos Sainz de Robles, Diccionario de la Literatura, t. 1, Edit. Aguilar, Madrid, 1982.
Fernando Lázaro Carreter, Diccionario de Términos Filológicos, edit. Gredos, Madrid, 1998.
Helena Beristáin, Diccionario
de Retórica y Poética, Editorial Porrúa, 9ª
ed., México, 2006.
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