¿Qué es el aprendizaje inverso?
Aula Inversa y aprendizaje inverso se refieren a una nueva forma de dar clases y
aprender. Está basada en la inversión de las actividades típicas de una clase
tradicional. Es decir: se consulta la información que proporciona el maestro
fuera de la clase, se hace la tarea dentro de ella. Esto dentro del modelo constructivista
implica un cambio de protagonismo en la construcción del conocimiento: el
alumno es el centro. El profesor se vuelve un facilitador, y el alumno un
agente más activo. Esto es respecto a la
enseñanza. Respecto al aprendizaje tenemos su contraparte: el aprendizaje
inverso. Esto es el diseño de un entorno de aprendizaje adecuado para el
alumno. Lo que vuelve peculiar a esta metodología es el uso de la tecnología a
través del vídeo, el internet y aplicaciones.
Las personas que se han incorporado al mundo digital tienen un PLE,
que es conocido como Personal Learning
Enviroment (Entorno de Aprendizaje Personal). Se puede definir como “el
contexto particular en el que cada uno de nosotros aprende vinculado a las
Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC), los recursos,
herramientas, actividades y fuentes de información que utilizamos de manera
persona y cotidiana para aprender”[1].
La orientación del entorno de
aprendizaje personal al aprendizaje escolar es lo que hace el aula inversa. Al parecer la idea de un entorno digital
intencionado para el aprendizaje inició en el 2001 con el proyecto NIMLE
(Northern Ireland Integrated Managed Learning Enviroment), pero fue hasta 2004
cuando se comenzó a hablar especifícamente del PLE en el congreso anual del
Joint Information SIstems Commitee de Gran Bretaña.[2]
El aula inversa justamente
busca generar ese ambiente. De acuerdo
con el proyecto Fiplled Classroom, es
“un modelo pedagógico que transfiere determinados procesos de aprendizaje fuera
del aula y utiliza el tiempo de clase, junto con la experiencia del docente,
para facilitar y potenciar otros procesos de adquisición y práctica de
conocimientos dentro del aula”.[3] Mientras que para la Flipped Learning Netwok
el aprendizaje inverso es “un enfoque pedagógico en el que la instrucción
directa se desplaza de la dimensión del aprendizaje grupal a la dimensión del
aprendizaje individual, transformándose el espacio grupal restante en un
ambiente de aprendizaje dinámico e interactivo en el que el facilitador guía a
los estudiantes en la aplicación de los conceptos y en su involucramiento
creativo con el contenido del curso”.[4]
Miguel Sedoff y Sandra Bonnetti señalan
que esta definición ha sido perfeccionada por Robert Talbert, quien dice que el
aprendizaje inverso: “es un enfoque pedagógico en el que el primer contacto con
nuevos contenidos de aprendizaje pasa del espacio de aprendizaje grupal al
espacio de aprendizaje individual en forma de la actividad estructurada y el
espacio grupal resultante se transforma en una dinámica, un entorno de
aprendizaje interactivo donde el educador guía a los estudiantes a medida que
se aplican los conceptos y se potencia la participación creativa en el tema”.[5]
Uno se pregunta entonces qué
diferencia hay entre aula inversa y aprendizaje inverso. ¿Acaso hay una
diferencia sustantiva entre modelo pedagógico y enfoque pedagógico? Ellos señalan que se puede hacer aula inversa
sin aprendizaje inverso. Al parecer es
más amplio el concepto de aprendizaje inverso que el de aula. Es un metamodelo
que permite hacer aula inversa más metodologías constructivistas. Las metodologías activas que se pueden
utilizar con el aprendizaje inverso son: el aprendizaje basado en proyectos,
aprendizaje basado en problemas, estudio de casos, estrategias de roles,
debate, seminarios socráticos, aprendizaje basado en equipos, simulaciones,
enseñanza justo a tiempo (Just-in-time-teaching), enseñanza por compañeros o
aprendizaje cooperativo o entre pares (Peer Instruction) y PEPEOLA.
Dicho metamodelo consta de
cuatro pilares para su funcionamiento: 1) un ambiente flexible (que permite
mezclar distintos estilos de aprendizaje), 2) una cultura de aprendizaje (que
se fomenta con la centralización de la responsabilidad de la adquisición de la
información, el marketing de la idea de que al que prepara la clase le va bien y la gamificación), 3) un contenido dirigido (selección o
creación de contenidos para los alumnos), 4) un docente profesional
(seguimiento continuo y cercano a los alumnos mediante retroalimentación).
El modelo surgió en 2006 con los profesores de
química de bachillerato Aaron Sams y Jonathan Bergman. A la par de ellos el modelo también fue
gestado por el profesor de matemáticas Salman Khan, quien ese años (2006) se
percató de la importancia del video-tutorial en la explicación de las
matemáticas, así que fue creando videotutoriales de tal manera que llegó a la
conclusión de invertir la clase de la misma manera en que lo hacían de manera
más discreta Sams y Bergman. Sin
embargo, la tesis de Khan se hizo famosa al ser lanzada en una Ted Talk del
2011.
El diseño de una clase de
aprendizaje inverso
La preparación de una clase de
aprendizaje inverso implica la preparación del material que los alumnos verán
en casa. Esto es producto de una creación de contenidos, o bien, es el
resultado de la curaduría de un contenido. Las etapas de la curaduría son:
búsqueda, selección, adaptación y
transmisión de la información que el docente usa. Luego se elabora una guía de actividades para
que el alumno consulte el material. Después se escoge la estrategia de
aprendizaje activo que se va a emplear a la hora de clase y se hace la
planeación concreta de microenseñanza de esa sesión. En esta metodología es importante verificar
que el alumno haya hecho la actividad individualmente en su casa. También ayuda
invitar a los padres a ver los vídeos de las clases con los alumnos. Pero
esa verificación se realiza con actividades como resolución de cuestionarios o
entrevistas que echen manos con aplicaciones como Google Forms, Kahoot,
Socrative, etc. Luego de que se desarrolle la estrategia docente viene una
etapa de retroalimentación de los alumnos a la propia dinámica de la clase, a
su aprendizaje y la evaluación.
Bibliografía
https://www.youtube.com/watch?v=nTFEUsudhfs (consultado el 23 de junio de 2020).
Alfredo Prieto Martín, Flipped Learning. Aplicar
el modelo de aprendizaje inverso, edit. Narcea, Madrid, 2017.
Miguel Sedoff y Sandra Bonnetti, Flipped Learning. Una guía para darle la
vuelta a tu clase, edit, Logos, versión Kindle.
[1]
Miguel Sedoff y Sandra Bonnetti, Flipped Learning. Una guía para darle la
vuelta a tu clase, edit, Logos, versión Kindle.
[2]
Respecto a los contenidos docentes para un entorno de aprendizaje personal, hay
dos posibilidades: diseñarlos o seleccionarlos. Es decir, el profesor los crea
o elige los contenidos más adecuados (curaduría de contenidos).
[3] Miguel Sedoff y Sandra Bonnetti, Flipped Learning. Una guía para darle la
vuelta a tu clase, edit, Logos, versión Kindle.
[4] Miguel Sedoff y Sandra Bonnetti, Flipped Learning. Una guía para darle la vuelta
a tu clase, edit, Logos, versión Kindle.
[5] Miguel Sedoff y Sandra Bonnetti, Flipped Learning. Una guía para darle la
vuelta a tu clase, edit, Logos, versión Kindle.
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