¿Qué es la educación?

¿Qué es la educación? Es una pregunta a la que todos nos hemos respondido tarde o temprano, que nos volvemos a reformular ocasionalmente y que partimos de una preconcepción de lo que es ella a la hora de dialogar. No importa que odiemos o amemos la escuela o a nuestros padres, tenemos un concepto  de ésta. Suponemos que debe de tener ciertos fines, valores y modos de funcionar.
Existen varios niveles de pensamiento sobre el tema de la educación. En primer lugar hay un nivel ingenuo sobre nuestras ideas en torno a dicho asunto. Se califica así porque no es claro ni está muy reflexionado. Luego está el nivel científico-positivo de las disciplinas científicas que se encargan de estudiar el tema, en el cual hay categorizaciones elaboradas y metodologías rigurosas. Finalmente está el nivel filosófico  que es una reflexión profunda sobre el  ser de la educación.  Según Guiseppe Flores D’Arcais este nivel busca la fundamentación del anterior, es decir, hace una metaciencia de las ciencias de la educación.  En fin, la Filosofía de la Educación responde a tres modelos: el metafísico, el normativo y el analítico. El primero entiende a la educación con una cosa que tiene componentes y propiedades, el segundo genera una regulación sobre el deber ser del acto educativo, el tercero reflexiona sobre los problemas que el lenguaje educativo lleva consigo, problemas que no son sólo palabras sino que también implican actos. Es decir, al hacer este análisis, se abarca la teoría y práctica educativas para modificar aquellas inadecuadas. Algunas de esas teorías educativas, por ejemplo, son descriptivas; pero otras son prácticas. Sí: son teorías prácticas  porque dan prescripciones al sujeto educativo.  
En consecuencia, estos tres modelos (el metafísico, el normativo y el analítico) no son necesariamente excluyentes a la hora de hacer Filosofía de la Educación. Por cierto, el Diccionario Enciclopédico de Ciencias de la Educación la define como  “la rama de la filosofía que tiene como objeto la reflexión sobre el hecho educativo en el ámbito de sus principales protagonistas (docente-estudiante) y de las experiencias y prácticas pedagógicas y didácticas”.
Luego los problemas de la Filosofía de la Educación girarán en torno a una ontología de la educación (qué es ella, qué componentes y naturaleza tiene),  una epistemología de la pedagogía (cómo se categoriza, qué se puede saber, medir o decir de la educación),  una teleología educativa (qué finalidades tiene), una axiología educativa (qué valores posee o debe tener), y la lógica educativa (cómo se organiza el proceso educativo).
Las definiciones de qué es la educación pueden variar muchísimo. Etimológicamente educación viene del latín Educatio es la acción de criar. Esa palabra se deriva del verbo educare, que significa criar. Pero educare a su vez significa conducir hacia fuera lo que el sujeto tiene dentro o  bien sacar hacia el exterior de lo que se ha nutrido –ex (fuera), ducere (conducir, nutrir)-.   Esta metáfora supone una especie de cambio. Por eso J. Ferrero define a la educación como producir al hombre, mientras que Quintiliano la entiende como un hacer del hombre lo menos imperfecto posible.  La palabra educación en la lengua española surgió en el siglo XVII. Se refería a una especie de acrecentamiento intelectual.
De una manera menos etimológica y más reflexiva, John Dewey define a la educación como “la suma total de procesos por obra de los cuales una comunidad o grupo social pequeño o grande, transmite sus poderes y objetivos a fin de asegurar su propia existencia y su continuo crecimiento”. Dewey hace énfasis en la dimensión social de la educación.  Igualmente resalta este aspecto Emilio Durkheim quien dio una definición que es muy clásica la explica como la “adscripción de los educandos a las características  y funcionamiento de la sociedad adulta en el marco de una cultura determinada”.  En cambio, W. Cunningham hace hincapié en su aspecto personal, porque para él “es un proceso de crecimiento y desarrollo por el cual el individuo asimila un caudal de conocimientos, hace suyo un haz de ideales de vida, y desarrolla la habilidad de usar esos conocimientos en la prosecución de estos ideales”. Cabe mencionar que la educación es tanto socialización como individualización. Dicha polaridad genera frecuentemente tensiones entre lo que la comunidad demanda del individuo y lo que éste quiere de su vida o de la sociedad misma. Para Savater la educación es una revelación del otro y complicidad humana, para Adolf Rude es formación en valores, para Hans Georg Gadamer la educación es fusión de horizontes que transmite el pasado desde un presente socio-cultural de cara al futuro a partir de la interpretación de lo que fue y es. La lista de definiciones puede ser larga.
Sin embargo hay algo que comparten los conceptos de educación: tienen por centro al hombre,  denotan una práctica intersubjetiva, están ligados a objetivos y aducen a un producto, a  algo que podemos circunscribir en conocimientos, habilidades y actitudes.
Esto  lleva a pensar que el acto educativo tiene una estructura: educador, educando y un bien educativo. El supuesto de lo anterior es una cultura y un mundo.  Educador y educando más que ser individuos concretos son roles. Los bienes educativos son bienes culturales. Son aprendizajes y creaciones variadas que implicaron la intersubjetividad. Por ende, las características que tiene dicho acto implican los siguientes elementos: necesidad, relatividad, bilateralidad y voluntariedad. La necesidad se refiere a inevitabilidad de ser educado en las comunidades humanas; la relatividad a la variabilidad y diferencias que generan de culturas en la educación; la bilateralidad supone que el doble rol de educador-educando es jugado por las mismas personas en diferentes contextos (especialmente los informales), es decir, una persona puede ser educador en ciertos momentos, lugares y situaciones para luego asumir el rol de educando; y la voluntariedad se refiere a que la educación sólo es exitosa si hay una voluntad de la sociedad de aprender, de educarse.
Un aspecto a considerar es que la educación es siempre una acción inacabada, jamás termina, siempre estamos aprendiendo, enseñando, transmitiendo cosas.  Este aspecto parece circunscribirse a su propia necesidad. La educación es actividad permanente.
Por otro lado, la educación tiene dos niveles: el espontáneo o reflejo y el intencionado o sistemático. El primero es natural, sin normatividades; el segundo, en cambio, es controlado y regulado por una institución: la escuela. La educación intencionada tiene cuatro componentes detectables: el ideal de la educación, los fines educativos, los proyectos y los sistemas educativos.  El ideal es un “modelo  de vida (o de ser humano) que refleja la concepción del mundo de un grupo o individuo y que se refleja en  los fines últimos de su concepción de la educación”. Los fines son “enunciados normativos (que sirven como pauta) acerca del resultado  del proceso educativo en tanto que estado deseable y alcanzable para una personalidad en desarrollo”. Algunos teóricos, como Roth, creen que el fin último de la educación es la mayoría de edad de las personas, la adultez, es decir, que sea un individuo competente social y personalmente. Francisco Larroyo cree que los fines de la educación son: el correcto desarrollo biológico del ser humano, la culturalización y socialización, la profesionalización y la personalización. Para María Teresa Yuren el fin de la educación es la promoción de la riqueza social. Varían los enfoques, pero no están peleados. Quizá el único abordaje distinto es el de Luis Gurlintt quien señaló que la educación no tiene fines, que la vida tiene por fin la vida misma, que lo demás que se establezca teleológicamente varía según las necesidades de la época.  Luego, los proyectos educativos son formas de organizar la enseñanza sobre un plan de estudios que comprometa al alumno en una época determinada.  Todo proyecto educativo está sometido a una ideología con supuestos, un proyecto explícito y uno implícito regularmente contradictorio con el anterior. Por último, tenemos el sistema educativo, que es la “institucionalización de la educación derivada de la implantación del Estado liberal que  consta de: legislación, planeación, programación, infraestructura, funcionariado  y una comunidad”. Según Teresa Yuren los dos problemas más grandes a los que se enfrenta nuestro sistema educativo a nivel filosófico son la universalidad ilusoria de éste y la imposición de medidas y modelos extranjeros que se subordinan a los intereses económicos y políticos de otros grupos. 
La institución escolar en el caso mexicano es regulada por el Estado. Su normatividad, fines y valores los dictan el artículo tercero constitucional y la Ley General de Educación.  La educación en México, pues tiene una forma específica que según los textos jurídicos anteriores aspira a la universalidad, la gratuidad, el laicismo, la formación integral, el nacionalismo, los derechos humanos.

Cuestionario.


1.       ¿Qué es la filosofía de la educación?
2.       ¿Cuáles son los niveles de conocimiento sobre la educación?
3.       ¿Qué componentes tiene la educación?
4.       ¿Cuáles son los niveles de la educación?
5.       ¿Cuáles son los componentes de la educación intencionada?
6.       ¿Qué características tiene el acto educativo?
7.       Explica qué tienen en común los conceptos de educación.
8.       ¿Cuál es la etimología de educación?
9.       ¿Qué institución regula la educación en México?
10.   Investiga el contenido del artículo tercero constitucional y haz un esquema en  dónde se  muestren los fines y valores de la educación mexicana en relación directa con el cuerpo y párrafos de dicho texto.

Bibliografía


T. Francisco Larroyo, Historia General de la Pedagogía, edit. Trillas, México, 1979.
Horst Schaub y Karl G. Zenke, Diccional Akal de Pedagogía, edit. Akal, Madrid 2001.
  Rafael Gil Colomer (editor), Filosofía de la Educación Hoy. Diccionario Filosófico Pedagógico, edit. Dykinson, Madrid, 1997.
W.  Moore, Filosofía de la Educación, edit. Trillas, México, 2000.


Comentarios

Entradas populares de este blog

Proposiciones atómicas y proposiciones moleculares

¿Qué son las artes menores?

¿Qué es un instagrammer?