La entrevista periodística
Una entrevista es una conversación dirigida con el fin de obtener
información. Las hay conductistas y no conductistas. Las primeras buscan
afectar el comportamiento del entrevistado, las segundas, no. El
entrevistador pretende obtener la información. El entrevistado la brinda. Las
entrevistas proporcionan información inmediata de manera flexible y cálida. Se
pueden calificar como una relación balanceada –que no igualitaria- en un
sistema de comunicación de doble sentido. El balance lo da la información
satisfactoria. También es un sistema abierto, dinámico y de resultados
variados. Se puede realizar una entrevista a partir de un plan o bien de un
sondeo. La entrevista demanda del entrevistador el uso de sus capacidades
cognoscitivas: observación, memoria, lógica (debe de categorizar la información
recibida, inferir relaciones, asimilar, acomodar), y empatía con el
entrevistado (reciprocidad y conocimiento para entender el rol del otro).
Las entrevistas se deben de regir por las normas de cortesía propias de
la cultura en la que están inscritas. Están en relación con el vocabulario
usado, la postura del cuerpo, la cercanía física entre el entrevistador y el
entrevistado.
Etimológicamente entrevista significa
en latín “los que van entre sí”. El entrevistador puede ser uno o más personas,
igualmente los entrevistados.
Tipos de entrevista
Hay varios tipos de entrevista, según su objetivo. Las hay de reporte de datos
personales (son escritas y para brindar información personal), de encuesta o
muestreos (siguen una estructura formulada con respuestas categorizadas en un
esquema), para investigación (de corte psicológico), clínicas (para
diagnosticar un estado de salud), con informantes clave (de tipo sociológico y
antropológico), guiadas (para gente que tiene problemas de dominio del
lenguaje en el que se realiza), de grupo, de trabajo, telefónicas y de medios
de comunicación masiva.
La entrevista de medios de comunicación masiva
Estas últimas son las del interés del
presente artículo. Es una conversación pública. Tiene las reglas de una
conversación privada: proximidad, intercambio, interrupciones, espontaneidad.
Pero su libertad está restringida. Las instituciones condicionan la
conversación. Por eso es que Jorge Halperín la define como la más pública de
las conversaciones privadas. Según él, es un tanto absurda porque un sujeto
desconocido para el interrogado hace preguntas esperando revelaciones, tratando
de mostrar su naturaleza, puntos de vista, su vibración. Por lo tanto, la
entrevista está en un punto medio entre la intrusión y un encuentro cálido.
Filosóficamente el ejercicio de la
interrogación abre al sentido último de las cosas, la vida es un preguntar a sí
misma sobre ella. La pregunta detiene el mundo por un instante. Lo somete a
examen. De ahí que fascinen tanto a la gente.
Regularmente las entrevistas son hechas
para radio, televisión, prensa o internet. Éstas son pensadas para un
auditorio. Deben de provocar su interés. Son pensadas en función del
tiempo-espacio permitido. Por lo general son breves. Requieren también
facilidad de palabra, organización cognoscitiva y presencia escénica.
Aquí no sólo pesa la relación entre el entrevistador y el entrevistado, sino
también entre el entrevistador y su auditorio.
Tipos de entrevistas periodísticas
En el ámbito periodístico las
entrevistas pueden ser: informativas (son sobre temas específicos y dan material
extenso sobre ese asunto), de personaje o perfil (muestran el mundo interno del
entrevistado), de declaración (son las que dan información de manera anónima
dentro de instituciones públicas o privadas, o bien, de manera pública de parte
del poder en el momento que ocurre un evento importante), de opinión (son
aquellas que expresan en punto de vista sobre un tema, suelen ser más amplias
que las informativas), conferencia de prensa (con un entrevistado o más
entrevistados frente a varios entrevistadores forzosamente en un punto al mismo
tiempo), con más de un personaje a la vez (tiene dos o más entrevistados)
de ping pong (con una serie consecutiva de preguntas y respuestas breves),
por asalto (se realiza de manera imprevista, sin planeación entre el
entrevistador y el entrevistado; regularmente toma por sorpresa al informante),
encuestas (se realizan para sondear datos generales, tendencias de la
población bajo un formato muy específico de respuesta) y mixtas (que conjugan
dos más de estos formatos). Por su contenido, las entrevistas pueden ser
culturales, de deportes, espectáculos o de sociedad. El que haya diversos tipos
de entrevista demanda de formas de trabajar y estrategias distintas a la hora
de entrevistar. Las encuestas, por ejemplo, demandan una metodología de
elaboración de la pregunta muy estricta, pero son muy impersonales, mientras
que las entrevistas de declaraciones o de personaje suelen ser sumamente
confrontativas.
Tipos de entrevistados
El entrevistado es elegido por una
razón. Regularmente es porque es alguien famoso, curioso, representativo, es
clave de algo, está ligado a una noticia, porta un saber o ideas muy valiosos.
Según su actitud, los entrevistados
pueden ser hostiles, angustiados, complacientes y elusivos. Los
primeros dan la entrevista con renuencia. Muestran resentimiento o agresividad
hacia el entrevistador y/o las preguntas de éste. Cuando hay una
antipatía entre el entrevistador y el entrevistado se dice que la entrevista es
a cara de perro. El angustiado
experimenta ansiedad, que puede ser ocasionada por muchos factores, como el
miedo a no cubrir ciertas expectativas durante la entrevista o manifestar una
culpa respecto al tema en cuestión. El complaciente, en cambio, permite la
facilidad de abordaje, responde certeramente a las preguntas. El elusivo se
muestra complaciente también, incluso, demasiado complaciente, pero da
respuestas que evaden proporcionar la información. Se preocupa más por caer
bien que por brindar la información que se requiere. Las razones pueden ser de
resistencia inconsciente o bien consciente. Gabriel Bauducco clasifica a los
entrevistados en función de sus profesiones. Dice que los principales tipos
son: el político, policías y militares, hombres de ciencia, deportistas,
empresarios, gente del espectáculo y escritores.
Estructura de la entrevista
Toda entrevista posee una estructura,
la cual, es en función de su contenido. Es de lo que sucede y trata. Supone un
orden de las preguntas, un formato de preguntas y respuestas y una manera de
registrar la entrevista. Toda entrevista tiene un tema. Debe de estar clara la
finalidad de la entrevista. La entrevista se puede realizar totalmente sobre un
tema central o bien sobre temas menores en torno a un tema central. El
contenido de las preguntas debe de ser claro e inteligible. Debe de ayudar al
entrevistado a recordar y organizar sus ideas. Toda entrevista tiene una
localización y una duración. Las entrevistas cortas pueden ser en cualquier
lugar, las largas en un sitio donde el entrevistado pueda estar cómodo,
sentado. El escenario debe de ser lo más adecuado posible.
El entrevistador debe de vestir de una
forma que no distraiga al entrevistado, sentarse con una postura cortés, no
acercarse demasiado de manera que se invada el espacio vital. El entrevistador
debe de convertirse en una figura no peligrosa ante la cual entrevistar se
pueda sincerar. En el caso de una entrevista audiovisual, el entrevistador y el
entrevistado deben de estar sentados de tal manera que ambos estén en ángulos
distintos, dando prioridad al entrevistado; de preferencia el entrevistador
debe de estar posicionado cerca de la cámara, pues así, cuando el entrevistado
hable al entrevistador parecerá que le está hablando al espectador, a la
cámara. El entrevistador puede aparecer en la entrevista delante de la cámara,
detrás de la cámara o no aparecer nunca en la entrevista. El entrevistado puede
aparecer desde los pies hasta la cabeza en el vídeo (plano entero), puede aparecer parcialmente de las
rodillas a la cabeza (plano medio largo) o de la cintura a la cabeza (plano
medio corto). Se puede enfocar desde un plano picado (como si el espectador
fuera más alto que el entrevistado y lo viera de arriba abajo) o desde un plano
contrapicado (que el espectador fuera más pequeño y lo viera de abajo a
arriba). En ocasiones se pueden hacer acercamientos de primer plano (que figure
el rostro del entrevistado) o de un detalle del cuerpo (plano detalle), se
puede hacer un paneo, un contrapaneo. En
la entrevista audiovisual, no sólo figuran las ideas, sino también la voz y la
imagen. Interactúan los tres elementos como parte de una misma sinfonía. Eso no
sucede con el formato radial, ni el escrito.
En un ámbito de corte periodístico, la
entrevista requiere de preparación previa por parte del entrevistador. Se
debe de investigar previamente al entrevistado en el archivo o las fuentes que
tenga disponible el investigador (pueden ser otros periodistas, conocidos del
entrevistado o el internet tomando a éste último con precaución). Hay archivos
noticiosos importantes en línea, como el del New York Times (http://www.nytimes.com/content/help/search/archives/archives.html). También se
debe de traer un guión elaborado de preguntas. Esto no quita que durante la
entrevista se puedan añadir preguntas espontáneas que enriquezcan la
conversación. De hecho, no se debe de cerrar la entrevista, hasta que se haya
obtenido la información que se persigue. Si se vuelve a entrevistar a un
personaje, conviene repasar la entrevista anterior.
Cuando se inicia la entrevista se debe
de presentar al entrevistado por más conocido que sea, dando su nombre,
profesión e incluso algún dato personal. Luego se procede con el
interrogatorio. En esta instancia se pueden hacer preguntas de manera directa o
indirecta, preguntas hipotéticas (qué pasaría sí…), preguntas simples o varias
preguntas a la vez, se pueden hacer afirmaciones esperando que el entrevistado
reaccione a ellas, se pueden solicitar explicaciones sobre aseveraciones del
entrevistado que no entiende el entrevistador, se puede guardar silencio o
respetar el silencio del entrevistado por unos segundos. No se debe de
interrumpir al entrevistado en el desarrollo de una idea, se debe de cuidar que
el orden de las preguntas permitan la exposición clara y ordenada del
pensamiento del entrevistado. Se debe de cerrar la entrevista con un buen
final, buscar en la conversación un buen remate.
Si la entrevista es escrita ésta se
puede redactar de dos maneras: de estilo directo o estilo indirecto. La
primera, que es la más tradicional y la más usada, muestra un encabezamiento,
luego las preguntas y las respuestas. La segunda, que es menos frecuente pero
resulta interesante, consiste en entretejer las declaraciones del entrevistado
con las apreciaciones del periodista. La voz del entrevistador es el hilo
conductor que habla del entrevistado. Hay descripciones de lo observado,
comentarios del entrevistador. También se le llama entrevista glosada. Una tercera manera que ha surgido
recientemente es la del estilo mixto. Éste entremezcla los estilos anteriores.
Las entrevistas contemporáneas pueden llevar intertítulos dentro de su cuerpo.
En las entrevistas escritas difícilmente toda la conversación es reproducida.
Regularmente es editada. Se omiten los balbuceos, las reiteraciones, los
accidentes de la conversación. Lo mismo puede suceder en el formato televisivo,
aunque en éste también hay quien prefiere mostrar la charla entera.
Bibliografía
Daphne Keats, La entrevista perfecta. Cómo obtener toda la
información necesaria en cualquier tipo de entrevista, edit. Pax México,
México, 2014.
Gabriel Bauducco, Secretos de la Entrevista. Manual para
periodistas, edit. Trillas, 2a ed., México, 2015.
Jorge Halperín, La entrevista
periodística, edit. Aguilar, 2007.
https://es.wikipedia.org/wiki/Entrevista_period%C3%ADstica (consultado el
26 de mayo del 2016).
http://coleccion.educ.ar/coleccion/CD30/contenido/pdf/tres_capitulos.pdf (consultado el
26 de mayo del 2016).
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