La invención retórica o inventio


Es el primer de los cinco pasos para elaborar una pieza oratoria. La inventio consiste en descubrir y crear los argumentos más adecuados para un discurso. Según la Retórica a Herenio es el hallazgo de asuntos verdaderos o verosímiles que hagan probable la causa. Responde a la pregunta: ¿Qué voy a decir a los oyentes? Sam Leith señala que se deben de considerar tres aspectos: el ethos, el logos y el pathos, es decir,  mostrarse como confiable o como autoridad en el tema, dar argumentos que partan de las creencias compartidas por una sociedad (lugares comunes), y conmover a través de las argumentaciones las emociones buscando hacer reír, llorar, asentir.

Los mencionados lugares comunes son una estrategia muy importante. Aristóteles señalaba que estaban en relación con lo que pensamos que es real, posible e imposible. Pueden emplearse para remitir a creencias o supuestos colectivos mediante descripciones de personas, de seres vivos, la narración de actividades, la explicación de ideas o teorías. En la Antigüedad se hablaba, además, de estos otros lugares comunes: a re, que tenían que ver con las creencias en torno al asunto a tratar, fundamentalmente en relación con la perspectiva causa-efecto; lugares a loco,  sobre lo que se cree de un lugar donde se está y de lo que se puede hacer ahí; los lugares a tempore, que hablan de lo que se cree de un momento histórico o una ocasión específica (el kairós); lugares a facultate, relativos a la capacidad e instrumentos para la acción; lugares a finitiore, sobre los nombres que se le ponen a los hechos; los lugares a similia contrario y a comparatione que recurren respectivamente a semejanzas entre casos o hechos, diferencias  o a ambas (semejanzas y diferencias), lugares a fictione que exponen un caso hipotético; o lugares a circumstantia, que se concentra en las circunstancias que rodean a un proceso. 

Para hacer esto eficazmente hay que estudiar al auditorio consideran los siguientes factores: edad, sexo, cultura, lugar de nacimiento y de residencia, su profesión.   También debe de seleccionar información de actualidad sobre el asunto a tratar. Se debe de ser original mostrando  sus propias deducciones a partir de sus valores y cosmovisión, pero también a partir del estudio (lectura crítica de obras escritas), la reflexión  (inducción, deducción, analogías) la imaginación (invención creativa de soluciones).

En la adecuada realización de la inventio concurren el ars y el ingenium, la técnica y las cualidades del orador, buscando la utilidad de la causa y las ideas más aptas (aptum) y decorosas (decorum).

Bibliografía.

Fernando Romo, La Retórica. Un paseo por la retórica clásica, edit. Montesinos, España 2005.
José Antonio Hernández y María del Carmen García, El arte de hablar. Manual de retórica práctica y de oratoria moderna, edit. Ariel,  Barcelona 2008.
Sam Leith, ¿Me hablas a mí? La retórica de Aristóteles a Obama, edit.  Taurus, México, 2012.
Tomás Albadaladejo, Retórica, edit, Síntesis, España, 1993. 

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